BERGOGLIO VISITO LA AMIA

Llegó solo ayer, pasadas las 16, a Pasteur 633 y cumplió con el ritual de quienes visitan el edificio de la AMIA, reconstruido tras el atentado de 1994. Recorrió la plaza seca, colocó una ofrenda floral, se detuvo y oró delante del mural que evoca a las 85 víctimas del atentado terrorista contra la mutual judía, entre ellas el sacerdote Juan Carlos Brumana.
El cardenal Jorge Bergoglio realizó ayer su primera visita a la AMIA tras el ataque del que se cumplirá un nuevo aniversario el próximo 18 de julio. El encuentro de colectividades fue protocolar, “una visita de cortesía”, coincidieron las partes. Sin embargo, ambos coincidieron en su deseo de trabajar una agenda de temas comunes, como la cuestión social argentina, y también sobre su rechazo al matrimonio gay, supo este diario.
De hecho ambas partes expresaron un temor en el que hasta mencionaron la industria del turismo. Fue el cardenal quien apuntó que Ushuaia podría ser nombrada también “capital gay”. De esta manera, junto a Buenos Aires estaría de esta manera promoviendo un circuito contra el que había que “luchar”, se lo escuchó. La dirigencia ortodoxa que conduce AMIA desde hace años no dudó en apoyar esta visión.
Apenas cruzó los pesados portones de hierro que buscan garantizar la seguridad del edificio construido sobre las ruinas del otro, el arzobispo de Buenos Aires y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina fue recibido por el presidente de la AMIA, Guillermo Borger. Después del recorrido juntos por el patio de AMIA, anfitrión e invitado subieron al quinto piso donde a puertas cerradas, el cardenal también conversó con el Ejecutivo de la mutual judía. Entre ellos, una presencia esta vez atípica y resonante: el Gran Rabino de la comunidad judía argentina Salomón Benhamú Anijdar.
Una hora después del encuentro, Borger contó a la prensa que había sido una reunión “sin ningún tema central”, a agenda abierta, aunque sin dudas, se coincidió en actuar sobre la temática social. Borger dijo que a pesar de las coincidencias, la AMIA no había manifestado al prelado adhesión alguna formal a la visión sobre la pobreza que tiene la Iglesia Católica, la que en varias ocasiones sentenció que había habido un aumento de esta problemática, y con ello también aumentó la distancia que ya imperaba del gobierno kirchnerista. Borger sostuvo que iban a estudiar el documento sobre la pobreza impulsado por la Iglesia Católica. La presencia de Bergoglio en AMIA antecede al Coloquio Internacional sobre Derechos Sociales denominado “Derechos Sociales para Todos y entre Todos. Hacia una Ciudadanía Plena”, que tendrá AMIA y la Iglesia realizarán este miércoles y el jueves en la Universidad Católica Argentina. Ambas partes se prometieron futuros encuentros de trabajo ya más pautados.
Por su parte Bergoglio concedió unas breves palabras a los periodistas, tras su salida de AMIA. Consideró el atentado “un eslabón más de la cadena de dolor y persecución que el pueblo elegido de Dios ha sufrido en la historia”. Y señaló: “Debo reconocer que es una casa de solidaridad. Es una reserva que tenemos como pueblo. No la perdamos”. La última visita como la que hizo Bergoglio ayer a la AMIA, tuvo lugar en 1993, antes del atentado terrorista. Y la hizo su antecesor, el cardenal Antonio Quarracino.
Fuente: Diario Clarin