ONU: NUEVO CONFLICTO LIBANO-ISRAEL POSIBLE‏

El Secretario General Ban Ki-moon, advirtió hoy que un aumento de las tensiones entre Líbano e Israel podría llevar a un nuevo conflicto con consecuencias potencialmente devastadoras.
En un informe al Consejo de Seguridad de la ONU, Ban acusó a ambos países de violar la resolución del 2006 de alto el fuego que puso fin a 34 días de Segunda Guerra del Líbano entre Israel y Hezbolá.
El jefe de la ONU dijo que Hezbolá sigue manteniendo "una importante capacidad militar" en violación de las resoluciones de la ONU y un embargo de armas, y él volvió a llamar a Hezbolá y otras milicias a desarmarse "a través de un proceso político libanés"
Ban dijo que Israel continúa violando el alto el fuego mediante la realización de sobrevuelos diarios del Líbano y se niega a retirarse de la aldea fronteriza en disputa Ghajar del norte.
El secretario general dijo que ambas partes han violado la Linea Azul de separacion trazada por Naciones Unidas.
Ban dijo que las acusaciones israelíes en abril que Siria había proporcionado misiles Scud a Hezbolá - una acusación más tarde planteada por los funcionarios de EE.UU. - "aumento considerablemente las tensiones" entre Israel, Líbano y Siria. Las autoridades del Líbano y Siria negaron categóricamente cualquier transferencia de misiles.
El secretario general de Hezbolá no confirmó ni negó que la milicia había adquirido esas armas y declaró que la milicia estaba dispuesta a responder a los ataques de Israel, dijo Ban.
"La retórica escaló rápidamente, creando una percepción en el público que la reanudacion del conflicto era inminente," dijo el secretario general.
Por el momento, dijo, las tensiones parecen haber disminuido, debido principalmente a los mensajes de funcionarios sirios e israelíes de que "la confrontación no era deseada", así como las acciones diplomáticas del primer ministro libanés Saad Hariri, varios gobiernos árabes y europeos, EE.UU. y la ONU.
Sin embargo, Ban dijo que el aumento de las tensiones elevo "el fantasma de un error de cálculo por cualquiera de las partes que conduzca a una reanudación de las hostilidades, con consecuencias potencialmente devastadoras para el Líbano y la región."
La guerra del verano de 2006, que dejó unos 1.200 libaneses y 160 israelíes muertos, terminó en un callejón sin salida.
El secretario general expreso preocupación por varios ataques contra las fuerzas de la UNIFIL. Diplomáticos de la ONU dijeron que al menos un país contribuyente de tropas ha pedido al gobierno libanés desplegar más tropas al sur.
Ban dijo que ambas partes tienen la responsabilidad de abordar todas las cuestiones pendientes "con el fin de alcanzar un alto el fuego permanente y una solución a largo plazo" como se pide en la resolución de 2006.
Fuente: The Jerusalem Post