lunes, 20 de diciembre de 2010

LO QUE LAS FILTRACIONES REALMENTE REVELAN

By DOUGLAS BLOOMFIELD

No necesitábamos una inundacion de WikiLeaks de un cuarto de millon de cables del Departamento de Estaod para decirnos que los vecinos árabes de Irán están aterrorizados y quieren "la cabeza de la serpiente cortada," en las palabras del rey saudita, pero ellos esperan que EE.UU. o Israel hagan el trabajo porque carecen del coraje de hacerlo ellos mismos.
El rey de Bahrein, Hamid instó a EE.UU. a "terminar" el programa nuclear de Irán "por cualquier medio necesario", según los cables, y puntos de vista similares fueron reportados por parte de funcionarios de alto rango en Jordania, Egipto, los Emiratos Árabes Unidos, Omán y Qatar.
Los líderes árabes pueden abrazar- literalmente- en público al presidente iraní, Mahmoud Ahmadinejad, pero los cables dejan pocas dudas que lo detestan y le temen. Sumándose a la sensación de urgencia están los informes que China y Norcorea están haciendo incluso más de lo que se cree para ayudar a Irán a desarrollar misiles balísticos de largo alcance, armas químicas y tecnología nuclear, y las amenazas de los árabes del Golfo, que si no cuidamos de Irán se sentirán obligados a desarrollar sus propias armas nucleares.
El vertedero de documentos da nuevo crédito a las advertencias israelíes y expone a los árabes como dobles en el tema más crítico que enfrenta la región. Ellos dejan pocas dudas que Israel prefiere eliminar la amenaza iraní, pero tan seguros como que Allah hizo pequeñas manzanas verdes tu sabes que ellos denunciarían a los odiados sionistas por su brutal ataque a un querido hermano musulmán.
HAY PRECEDENTES. La primera vez que Israel frustró las ambiciones nucleares de un dictador brutal, fue condenada universalmente - y el coro fue dirigido por EE.UU.. En respuesta a las demandas árabes, el presidente Ronald Reagan envió su embajador ante la ONU a trabajar con los iraquíes en una resolución del Consejo de Seguridad condenando el ataque de 1981 que destruyó el reactor nuclear Osirak de Saddam Hussein.
Publicamente el mundo árabe se unió en su condena al estado judío, pero unos días más tarde, cuando a un informante de la CIA le preguntaron los miembros del Comité de Asuntos Exteriores acerca de la reacción árabe a la agresión israelí, respondió, "Buyia".
Los perplejos legisladores le pidieron traducir eso al Inglés. "Publicamente ellos están abucheando a Israel y en privado están vivando", explicó.
Es obvio hoy que el ataque hizo tanto por proteger a Arabia Saudita e Irán de una amenaza nuclear iraquí como lo hizo Israel. Saddam esperó casi una década por venganza, lanzando misiles Scud a Israel durante la Guerra del Golfo en 1991.
El segundo acto israelí de no proliferación nuclear fue la Operación Huerto, el ataque en septiembre de 2007 a un reactor de Siria, que se cree construido con la ayuda de Irán y Corea del Norte. A diferencia de 1981, Israel no anunció su ataque al mundo, sino unas semanas después a la administración Bush, que se había negado a hacer el trabajo por sí misma.
Rusia y China dicen que no quieren que Irán obtenga armas nucleares, pero sus acciones están teniendo un efecto contrario. Ellos son los jefes posibilitadores de Irán, protegiéndolo de la más intensa presión internacional.
China es el mayor problema; junto con su propio aliado canalla, Corea del Norte, está ayudando a Irán a adquirir misiles balísticos de largo alcance y capacidades de armas químicas, revelan los documentos filtrados. La capacidad de misiles de Irán es mayor de lo que se conoció públicamente previamente.
Israel ha sido acusada de estar detrás de acciones para impedir el programa nuclear de Irán, según informes de medios de comunicación, incluida la venta de equipos defectuosos para enriquecimiento de uranio, el gusano informático Stuxnet que dañó las centrifugadoras y ataques a científicos nucleares iraníes, entre ellos dos a principios de esta semana.
Binyamin Netanyahu, dio la bienvenida a la exposición de lo que los líderes árabes están diciendo en privado como prueba que están de acuerdo con él acerca de la amenaza iraní, y expresó la esperanza que ahora se diría públicamente. No contenga la respiración, Bibi. Los medios de comunicación sauditas no mencionaron una sola palabra de lo que los líderes árabes están diciendo, pero se encuentra disponible en el servicio en lengua árabe fuera de Irán y otros países.
Jeffrey Goldberg de Atlantic.com hace un punto interesante: El volcado de WikiLeaks refuta a los que dicen "es sólo Israel la que aboga por la guerra contra Irán", cuando en realidad "los grupos de presión más estridentes para la guerra contra Irán han sido los líderes árabes."
Otras víctimas de las filtraciones son castigadores de Israel como Zbigniew Brzezinski, el ex Asesor de Seguridad Nacional de Jimmy Carter, quien repetidamente advierte que un ataque israelí contra las instalaciones nucleares de Irán crearía "resentimiento" anti-israelí en la región y daño en la relación entre EEUU e Israel. Parece que lo contrario puede ser el caso.
El gobierno de Obama dijo que los líderes árabes han dicho que el progreso hacia la paz entre israelíes y palestinos haría la cooperación regional contra la amenaza iraní más fácil, sin embargo, cuando el presidente pidió personalmente al rey saudita que cumpla con eso fue rechazado.
El rey Abdullah, quien afirma la autoría de la Iniciativa Árabe de Paz, se ha rehusado reiteradamente a ofrecer algunas medidas de creación de confianza para fomentar una mayor flexibilidad de Israel en el vacilante proceso de paz. En cambio, se apega a su insistencia en que el gobierno de Israel debe cumplir con las demandas árabes antes que los sauditas hablen siquiera con el sobre la paz.
También muestran que, para todo su discurso sobre el deseo que los israelíes hagan la paz, su verdadera preocupación es Irán. Y la conversación de paz puede ser sólo eso - conversación.

Fuente: The Jerusalem Post- Este artículo fue traducido especialmente para el blog de OSA Filial Córdoba

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.